IBIZA SOLO PARA MI

CÓMO PASAR UN DÍA EN IBIZA EN PLENO VERANO Y NO SUFRIR DEL TURISMO DE MASAS
Ibiza es también un lugar donde la naturaleza, las tradiciones y las pequeñas escapadas pueden ofrecer un contrapunto mágico a las multitudes del verano. En agosto, la isla bonita puede verse invadida por el turismo de masas y es fácil sentirse abrumado por los turistas. Sin embargo, todavía quedan rincones escondidos, playas secretas, pueblos recónditos y rincones tranquilos donde disfrutar de la isla como un ibicenco.
Ibiza en agosto puede parecer abrumadora con su aglomeración de turistas y su calor agobiante, pero siguiendo estos consejos y privilegiando lugares más discretos podrás disfrutar de la isla de una forma más tranquila y auténtica, y reconectar con la verdadera esencia de Ibiza. Entonces, póngase sus zapatos para caminar, alquile un auto y salga a descubrir los tesoros escondidos de la isla. A continuación te damos algunos consejos y direcciones para pasar un día en Ibiza sin sufrir las aglomeraciones del verano.
1. Empieza el día temprano: por la mañana en Ibiza, antes de que lleguen las multitudes
Para escapar de las aglomeraciones de turistas el primer consejo es levantarse temprano, sobre todo en verano. Las primeras horas de la mañana son ideales para disfrutar de los paisajes. Si quieres evitar las hordas de turistas, es imprescindible empezar el día antes de las 9 de la mañana. La calma de la isla en estos momentos es increíble y podrás disfrutar del lugar antes de que el calor y las multitudes se apoderen de ti.
* Playa Cala Xarraca: Una pequeña playa todavía bastante secreta en el norte de Ibiza. Rodeada de vegetación, es ideal para empezar el día tranquilamente con un baño en aguas cristalinas
* Aguas Blancas: Perfectamente orientada hacia el amanecer, Aguas Blancas es muy tranquila por la mañana
2. Descubre calas escondidas y playas menos conocidas
Las playas más famosas, como Punta Galera, Ses Salines o Playa d'en Bossa, están llenas de gente desde la mañana. Sin embargo, Ibiza está llena de pequeñas calas y playas escondidas, a menudo más accesibles a pie o en barco, y que siguen siendo mucho más tranquilas. Estas son nuestras playas recomendadas:
* S’Illot des Renclí: Pequeña cala de agua turquesa, hay que llegar temprano por la mañana para buscar un sitio en la arena. El restaurante, sin grandes lujos, merece la pena. Te recomendamos disfrutar de la playa por la mañana y reservar una mesa en la terraza para almorzar, además de una siesta en tu ôbaba después de comer.
* Cala Pluma: Caminando desde Salines, después de Sa Trintxa hacia la pequeña torre de la costa se encuentran pequeñas calas de gran belleza y no demasiado conocidas.
* Cala Llentia: Situada cerca de Cala d’Hort, esta pequeña playa aún es relativamente desconocida y se puede acceder a ella a pie tras una corta caminata. El agua es cristalina y la vista de Es Vedrà, la misteriosa roca frente a la costa, es espectacular.
* Cala Martina: Pequeña playa con un restaurante muy agradable para comer una paella (Restaurante Cala Martina). El paseo por la costa es magnífico.
* Cala Jondal: Aunque esta playa tiene algunos chiringuitos muy populares (como Blue Marlin o Tropicana), es más tranquila que Playa d'en Bossa. También encontrarás calas más remotas a las que se puede acceder en barco.
* Cala Saladeta: Sólo si vas temprano por la mañana podrás disfrutar de esta pequeña playa situada a pie cerca de Cala Salada, y rodeada de pinos. El agua es turquesa, ideal para nadar. En verano el aparcamiento estará lleno desde la mañana, por lo que el número de personas es limitado respecto a otras playas de la zona. Aún así la playa estará llena de gente en verano.
3. Haz una escapada al interior de la isla, a los mercados y a los pueblos
Ibiza no es sólo la costa y sus playas. El interior de la isla está lleno de pueblos pintorescos, campos de higueras, olivos y rutas de senderismo escondidas. Ibiza es también un lugar donde la artesanía local y los productos ecológicos están muy presentes. En lugar de dirigirse a los mercados turísticos, explore los mercados menos conocidos, donde los lugareños van a comprar productos frescos y recuerdos auténticos. Si te alejas un poco de la costa, encontrarás paisajes salvajes y lugares mucho más tranquilos, alejados de las zonas turísticas.
* Es Cubells: Este pequeño pueblo encaramado en la montaña ofrece espectaculares vistas al mar y a la vecina isla de Formentera. Muchas veces es ignorado por los turistas debido a su acceso algo complicado, pero es uno de los mejores lugares para sentir la calma de la isla.
* Saint Joan: pequeño pueblo auténtico, los domingos hay mercado.
* Mercado de Sant Jordi: Ubicado cerca del aeropuerto, este mercado es frecuentado por lugareños y ofrece una buena selección de productos frescos, quesos, carnes y frutas de temporada. Ideal para vivir una experiencia auténtica y alejada de las aglomeraciones de turistas.
* Mercadillo hippie de Las Dalias (San Carlos) sólo temprano por la mañana: Demasiada gente para mi gusto, pero sigue siendo uno de los lugares para descubrir la artesanía local de Ibiza. Si vas cuando abre por la mañana evitarás las aglomeraciones y podrás encontrar objetos únicos, joyería hecha a mano y ropa bohemia.
* Santa Gertrudis: Este pequeño pueblo en el centro de Ibiza es perfecto para una pausa para almorzar lejos del bullicio de las playas. Entre sus encantadoras calles, restaurantes locales y tiendas artesanales, podrás pasar un rato tranquilo allí. Pruebe Boutique Claire y Bar Costa para vivir una experiencia auténtica.


4. Verde y fresco: disfruta de parques naturales y paisajes salvajes
La isla es más que un simple destino de playa. También alberga parques naturales y áreas protegidas donde se preserva la fauna y la flora. Estos lugares son perfectos para escapar del calor y las aglomeraciones sin dejar de estar inmerso en la naturaleza. Qué descubrir: El Parque Natural de Ses Salines, aunque este parque es conocido por sus salinas y playas populares, también alberga muchas rutas de senderismo y rincones apartados donde escapar de las multitudes. El Mirador de Es Vedrà ofrece impresionantes vistas de la mística roca mientras se encuentra relativamente lejos de las concurridas playas. Cueva de Can Marçà: Situada en el norte de Ibiza, esta antigua cueva en una ladera de la montaña ofrece un bonito paseo en un entorno natural y aislado. Perfecto para quienes gustan de combinar aventura y tranquilidad. El pico de Sa Talaia es también precioso.
5. Vete a comer o cenar a un lugar tranquilo, aléjate del turismo de masas
No es necesario que te encuentres en un restaurante lleno de gente en la ciudad de Ibiza o San Antonio. Hay lugares más discretos, donde disfrutar de un buen almuerzo o cena rodeado de la autenticidad de la isla. Aquí hay tres recomendaciones:
* Es Cucons (Santa Agnès): Precioso. Una sorpresa positiva en un entorno de naturaleza. Este agriturismo propone un restaurante en el campo, un rincón tranquilo en el paraíso.
* Can Berri Vell (San Agustín): Un restaurante escondido, enclavado en un antiguo pueblo ibicenco, con un ambiente íntimo y una cocina tradicional excepcional. Perfecto para una velada tranquila, lejos del bullicio.
* Es Torrent: Restaurante junto al mar en la zona de Cala Jondal, que ofrece platos de pescado y marisco fresco en un ambiente relajado y menos turístico que otros establecimientos cercanos. También hay una tienda.
* La Paloma (San Lorenzo): Este restaurante está situado en un entorno pintoresco en el corazón de la isla. Fuera de la ruta turística, ofrece una cocina mediterránea sencilla pero deliciosa. Muy encantador.
